Mientras que a quienes le hurtaron el auto se les impuso arresto domiciliario nocturno, compañeros de trabajo y amigos de la enfermera damnificada, realizan colecta para ayudarla a pagar los tres años de cuotas que aún faltan del vehículo.

Mientras que a quienes le hurtaron el auto se les impuso arresto domiciliario nocturno, compañeros de trabajo y amigos de la enfermera damnificada, realizan colecta para ayudarla a pagar los tres años de cuotas que aún faltan del vehículo.

Como se recordará, el pasado mes de octubre fueron hurtados 3 vehículos en el departamento de Rocha; una camioneta en la ciudad de Castillos, y dos autos en la capital departamental. Uno de los hurtos ocurrió el lunes 17 de octubre, a las 9 de la mañana en pleno centro de Rocha, se trataba de un Fiat Moby, perteneciente a una conocida enfermera, muy apreciada en la sociedad rochense.







El auto de la enfermera fue hurtado por dos personas mayores en situación de calle, quienes rápidamente salieron de la ciudad de Rocha con destino a Río Branco, en el departamento de Cerro Largo.

Una vez en la frontera, cruzaron el Río Yaguarón por el Puente Mauá, y comercializaron el vehículo hurtado en territorio brasileño. Con las pruebas recabadas por las cámaras de seguridad, personal de la Prefectura de Río Branco capturó a los dos delincuentes cuando regresaban en taxi hacia territorio uruguayo.

Puestos a disposición de la Justicia, ésta los condenó a dos años de arresto domiciliario nocturno. Posteriormente se supo que el auto Fiat Moby apareció prendido fuego en territorio brasileño. La condena impuesta por la Justicia generó reacciones en la población, ya que si bien los delincuentes no le iban a pagar el auto a la damnificada, pareció muy liviana la medida del arresto domiciliario nocturno.





Esta situación ha provocado gran angustia en la propietaria del auto, máxime teniendo en cuenta que aún le restan tres años de cuotas por pagar. Por tratarse de una persona muy querida en la ciudad de Rocha, compañeros de trabajo y amigos han organizado una campaña solidaria de fondos, para ayudar a Ana Ibáñez a pagar lo que está debiendo de un vehículo, que lamentablemente ya no podrá usufructuar.